martes, julio 31, 2007

La muchacha que sabia demasiado (1962)



Bueno, subo este post ya que voy a revisar algunos giallos, asi que debo empezar con ésta pelicula.

La joven Nora Davis, fanática de las historietas policiales, llega a Roma a visitar a una vieja amiga enferma, pero ésta muere repentinamente al llegar la noche, asi que Nora, asustada, sale a la calle en busca de ayuda, pero justo es asaltada por un ladron y cae en plena calle. Al levantarse, involuntariamente es testigo de un hecho terrible : una mujer se arrastra por la acera junto a una gran escalera y en la espalda lleva clavado un puñal, mientras que un misterioso sujeto aparece detras de ella, se asegura de que esta muerta y se la lleva sobre sus espaldas. Nora cae desmayada y al dia siguiente al contar su historia nadie puede creerle. Luego, descubrirá que un extraño empieza a seguirla, y recibirá misteriosas llamadas telefonicas de una voz anonima que le advierte que esta en grave peligro.

Pelicula en blanco y negro. Puedo decir que he visto una gran pelicula del director Mario Bava, una cinta que se señala es la que da inicio en el cine al muy famoso "giallo", el cine de suspenso y terror italiano. La cinta presenta unos momentos muy logrados de suspenso, ambientes casi fantasmales, decorados inquietantes, un buen manejo de la luz y sombra que me resultaron magistrales. Y con todo ello, el director se da maña de darle hasta cierto toque de humor a aquellos personajes, sobretodo en la protagonista personificada por Leticia Román, y bien secundada por el mitico John Saxon. El titulo de la cinta es un claro homenaje a la obra del director Alfred Hitchcok (especificamente a su film "El hombre que sabía demasiado"), siendo esto un intento de realizar un producto en la misma linea del suspenso que se hacia en Hollywood. De hecho, en América se evitó la traducción literal del título y se optó por llamarla "The evil eye".

Pero el trabajo de Bava gana identidad, de tal modo que dará inicio a un estilo el cual él mismo se encargará de dar forma más contundente en su siguiente pelicula "Seis mujeres para el asesino", gracias a su ambientación europea, y a elementos como la búsqueda de identidad de un asesino que parece omnipresente, la atmosfera casi irreal en mas de un momento, algunos inquietantes movimientos de la cámara, el giro inesperado en la resolución, cosas que luego tendrían en cuenta directores como Dario Argento, Sergio Martino y otros, pues aquellas asuntos y aquellas calles oscuras y sumidas en las sombras del centro de Roma, o aquellos espacios cerrados pueden ser vistos del mismo modo en "Suspiria", "Tenebre" y en otros filmes, aunque con ensañamiento y terror de los que carece "La muchacha que sabia demasiado", eso si hay que advertir. Aun asi, la puesta en escena impacta de tal modo que se puede decir que aqui nace éste famoso sub género.
Significativo es la primera secuencia en la que la protagonista lee atentamente un "gialli", publicación popular de cubierta amarilla sobre historias detectivescas, mientras viaja dentro del avión. En fin, muy recomendable el visionado de esta obra.




miércoles, julio 25, 2007

Hardware (1990)

Estamos en el futuro de La Tierra, un mundo devastado en el cual sobreviven unos cuantos aventureros quienes inician una busqueda de cuanta chatarra encuentren y que pueda ser comercializable. Hasta el refugio de un pequeño comerciante llega un extraño portando un misterioso cargamento; se trata de una cabeza metálica de lo que parece fue un viejo robot. El objeto es adquirido por Moses, un explorador de aquel mundo, el cual lo lleva a su chica, una jóven escultora llamada Jill. Pero el artefacto cobra vida y empieza a destruir a todo aquel que se ponga en su camino. El secreto de su origen es revelado: la máquina tiene por nombre Mark-13, y deben detenerla antes de que acabe con todos.

Varias veces habia leído sobre Richard Stanley, un director sudafricano el cual realizó en los primeros años de la decada del 90 algunos trabajos cinematográficos que hoy son considerados por muchos obras de culto. Asi que me puse manos a la obra y por fin pude ver éste su primer largometraje. "Hardware" es una pelicula muy interesante, que cuenta con una muy lograda puesta en escena inspirada en las fantasias cyberpunk, con un mundo futuro desolado y poblada por humanos y cyborgs, aventureros y recolectores de cuanta cosa sea útil y otorgue ganancia. Para lograr una atmosfera semejante, la cinta muestra suficiente material que da fuerza a lo que vemos en pantalla. Es un mundo post-apocaliptico barato, de serie B, reducido a una visión exterior desértica y desolada con un horizonte solar moribundo, y a unos cuantos espacios interiores, pero que están construidos aplicadamente, utilizando chatarras mecánicas, cubiertas de cableado que suelta chispas por doquier, y metales de cubierta opaca y gris, como el estado del mundo (La voz de cierto diskjockey se deja escuchar y nos dice que "la buena noticia del dia es que no hay buenas noticias"). Todo ello está filmado con una cámara que muestra una tendencia hacia el videoclip moderno, la cual empezaba a ser muy común por esos años debido a directores como Russell Mulcahy o David Fincher, con una atmosfera de poca iluminación y colores oscuros, pero que en los momentos de tensión cuenta con suficiente dinamismo, cargada de efectismo con luces chirriantes y edición rápida que permiten mostrar una puesta en escena que dificilmente resulta indiferente.


La historia, que se basa en el comic "Shok" realizado por Steve McManus y Kevin O`Neal, es el tipico cuento del monstruo que se enfrenta a unos personajes atrapados al interior de un recinto, los cuales caen en situaciones vistas ya muchas veces, como el apuro del protagonista por evitar la muerte de su chica, algunos chistes de poca gracia, el desarrollo del personaje femenino, de frágil a combativa, y la inclusión de personajes secundarios de poco interés y a todas luces victimas potenciales de la máquina mortal. Pero la dirección de Stanley permite apreciar estos elementos de un modo más fresco y renovado, para lo cual no duda en agregar algunos efectos visuales de tipo gore muy cumplidores, y primeros planos cargados de cierta aire alucinógeno, como aquellos en que el monstruo mecánico "resucita" luego de que aparentemente habia sido destruido, y se alza en medio de gran espectacularidad sonora cual coro de ángeles.

El director agrega algunos detalles interesantes al relato del monstruo: el nombre de la máquina (Mark - 13, o Marcos, capitulo 13) proviene de un pasaje de la Biblia en el cual Cristo anuncia a sus discipulos tanto la destrucción del Templo como el futuro Armagedon. Asimismo, el robot cuenta con ciertos toques que lo señalan como un ser maligno cual anticristo venido del infierno, como sus intensos ojos rojos, tener por nombre del código de su programa el de Baal, dios pagano de la lluvia, el trueno y la tierra, y tambien el tener el diseño de sus circuitos similares a un pentagrama. Y para colmo, colgar en su frente la bandera de los USA, pequeña broma sobre el carácter armamentista de la gran nación. Y es que el mundo de "Hardware" es un lugar desolado, en el cual el hombre sobrevive luego de haber llegado a conocer la destrucción total, y que a pesar de ello, debe seguir enfrentando la fuerza del mal inherente a su existencia, ya que como se demuestra, el robot asesino resulta ser una creación maligna de su pasado, que no quiere dejar de existir y que parece quiere revivir un apocalipsis que ya fue una realidad, pero que aún se cierne sobre ellos en forma amenazante.

Sin embargo, al interesante y logrado aspecto visual hay que contraponer que el guión que sirve al relato deja poco al aspecto dramático de sus protagonistas. Por el lado actoral no hay mucho que destacar. Actuan Dylan Mc Dermott, quien se luce muy poco ya que no cumple demasiado con el carácter del personaje, resultando algo frio y poco expresivo, la pelirroja y ciertamente cumplidora Stacy Travis, y los secundarios John Lynch y otros. Tambien está el músico y a veces actor Iggy Pop, pero sólo se escucha su intoxicada voz. "Hardware" es una cinta que destaca principalmente por la propuesta visual de su director, pero que resulta débil en el desarrollo de sus personajes, pero ésto no desmerece su esfuerzo como una historia que con pocos recursos y manteniendo el espiritu de la serie B más pura pretende mostrar un tétrico mensaje.

lunes, julio 23, 2007

Cypher (2002)

El ejecutivo Morgan Sullivan lleva una vida común y corriente, casado a duras penas y sumergido en la rutina impuesta por la vida moderna. Para escapar de su monotonía, acepta un empleo ofrecido por la empresa Digicorp, nada menos que como espía industrial, por el cual debe asistir con falsas identidades a tediosas conferencias en las que debe recabar toda la información disponible sobre los mecanismos y proyectos de distintas corporaciones. Al asistir a una de estas reuniones, una misteriosa mujer de nombre Rita llama su atención. Sorpresivamente, ella le advierte de un inminente peligro y lo envuelve en una intriga del más alto nivel, donde solamente el misterioso personaje de nombre Sebastian Rooks puede ayudarlo, aunque para ello debe descubrir su más grande secreto.

El realizador canadiense Vincenzo Natali se reveló en el Festival de Sitges de 1999 ganando el primer premio a la mejor película por "Cube", una muy buena cinta de ciencia ficción sobre una misteriosa prisión que recluye a un grupo de personas, las cuales son sometidas a una serie de trampas mortales mientras buscan cómo escapar de allí. La economía de recursos permitió demostrar la capacidad imaginativa de Natali al contarnos una historia que se llevó a cabo en un solo escenario al cual cambiaban constantemente la iluminación para crear el efecto de llevarse a cabo un recorrido por distintos compartimentos o habitaciones. A ello se sumaba un eficiente trabajo con los actores protagonistas quienes desarrollaban un convincente guion, el cual deparaba más de una ingeniosa sorpresa, con un final nada complaciente. Visto el resultado de esta cinta se auguraba el inicio de una carrera muy prometedora para su director, lo cual a niveles artísticos se confirmó con éste su segundo largometraje. Pero desgraciadamente el apoyo a sus proyectos ha sido muy limitado, por lo que aún estamos a la espera de una obra de mayor resonancia.

"Cypher" nos cuenta una compleja historia, muy al estilo de las fantasías del escritor Phillip K.Dick, aunque en realidad se trate de un guion original de Brian King, que aquí logra un relato muy interesante. El protagonista Morgan Sullivan, brillantemente interpretado por el actor Jeremy Northam, es un sujeto que transcurre por una vida común y corriente, envuelta en esa espiral a la que muchas veces el ser humano se ve sometido por llevarle el pulso a la vida moderna; que no da respiro y que lo sumerge en tareas que lo conducen al aislamiento y a la alienación de su entorno y de sus verdaderas motivaciones, pero cuyo rechazo puede causar un impacto catastrófico para el sistema establecido y para él mismo. Aquí se vuelve realidad la fantasía del sujeto que rompe con una vida monótona y se embarca en una peligrosa misión de espionaje, permitiendo desentrañar al mismo tiempo una serie de mentiras y engaños que no hacen más que demostrar la peligrosa manipulación que algunos siniestros intereses llevan a cabo con las personas, sólo para obtener el viejo y conocido beneficio del poder absoluto. Un lejano referente está en la cinta "Alphaville" de Jean Luc Goddard, donde también una especie de mente maestra parece controlar cada uno de los movimientos de la pareja protagonista. Pero en "Cypher" hay una sorpresa final que permite una ingeniosa vuelta de tuerca a la historia, y lo hace con bastante acierto.

Morgan es sometido a una serie de situaciones que lo desconciertan y que lo llevan a cuestionar tanto el sistema para el cual es empleado, como a los sujetos que lo rodean. Pero, muy especialmente, cuestiona su propia identidad, ya que aquellos sueños que solían acosarle parecen adquirir forma y tomar el control de sus pensamientos. La bella Rita, interpretada por la conocida actriz Lucy Liu, se convierte en su guía por éstos desconcertantes caminos, los cuales incluyen delirantes alucinaciones que constituyen el más llamativo efecto visual de la cinta, y también frías y hasta opresivas instalaciones que ocultan poderosos secretos.

La estética del film mantiene un toque futurista en aquella ambientación, pero sólo lo suficiente como para reconocer a simple vista aquel futuro como totalmente nuestro, de tal modo que sus intrigas y maquinaciones nos resulten muy cercanas, y por ello mismo, desconcertantes ante ese deshumanizante progreso al cual el mundo es sometido. Natali maneja las situaciones con una maestría de gran director, adecuando los escenarios al progreso de la intriga, de fríos colores al inicio, a otros más intensos y sombríos cuando el peligro pisa los talones del protagonista. Además, el director se toma el tiempo necesario para mostrarnos la desesperación y el desconcierto de Morgan, en secuencias como la revelación del lavado de cerebro en la sala de conferencias, los encuentros con la enigmática Rita, el juego de engaños con sus misteriosos empleadores, o aquel momento en una oculta instalación computarizada donde el suspenso se logra en forma magistral en un memorable enfrentamiento con el enemigo, y del mismo modo, en el encuentro con el verdadero Sebastian Rooks. A perdonarle el final, que resulta una concesión al cine de acción más comercial, pero que no desmerece lo logrado por el film en su conjunto. Ademas de que no está nada mal la explosiva secuencia.

El trabajo actoral como ya hemos dicho es muy destacado. Tanto Jeremy Northam como Lucy Liu cumplen con creces su labor, dando forma a dos personajes que muy fácilmente quedan en la memoria del espectador, como todo en ésta película, una gran realización a pesar de su poca distribución, sin duda, producto de intereses tan mezquinos como los villanos de esta historia.

domingo, julio 15, 2007

Curso 1999 (1989)

En el año 1999 las calles se encuentran en estado de alerta. La vigilancia ha incrementado la represión por parte de las fuerzas del orden. Las escuelas no escapan a ello, y las medidas de seguridad se han hecho estrictas, tanto en los alrededores como al interior de los edificios. En esta situación, las pandillas juveniles son aún más violentas, organizadas en forma clandestina a pesar de todos los controles impuestos. En la escuela principal de Seattle se ha puesto en marcha un nuevo programa educativo al emplearse en forma secreta a tres maestros cyborgs, quienes se encargan de la educación y disciplina de los jóvenes para controlar la violencia estudiantil. El encargado del programa es el misterioso Dr. Forrester, quien dirige a los cyborgs y les otorga una capacidad para impartir educación, y a la vez para conducir el comportamiento de los alumnos dentro de sus aulas. Pero los cyborgs resultan más peligrosos que cualquier joven delincuente, ocurriendo varias muertes sin explicación por parte de las autoridades educativas. Sólo un alumno llamado Cody Culp, un ex-recluso de una prisión juvenil, decide enfrentar a los nuevos profesores, aunque se encuentre solo ante esta amenaza.

El director Mark L. Lester realiza esta película, como una nueva versión de su anterior obra "Curso 1984", pero que ahora surge bajo la sombra del éxito de "Terminator" de James Cameron, y al igual que aquella cinta se inscribe dentro de la acción y ciencia ficción de serie B. "Curso 1999" describe un ambiente caótico, lleno de violencia e inseguridad, al cual acompaña un estado de represión que no hace más que incrementar la rebeldía. Las pandillas juveniles, todas ellas con pinta de "punkies" (movimiento generacional que representaba la rebeldía y la contracultura, surgida a mediados de los años 70´s), se sostienen en las sombras, equipadas con armas y vehículos blindados en forma rudimentaria pero efectiva, convirtiendo las calles en zona de guerra.

El joven Cody Culp, quien acaba de salir de la correccional, decide dejar este mundo de violencia al cual ha pertenecido como líder de una de las pandillas, y se niega a volver con ellos. Sin embargo, la amenaza que se cierne, las muertes que ocurren a su alrededor producto del descontrol en el que cae el propio sistema establecido, el que lo castigó anteriormente, hacen que vuelva a tomar parte activa, pero con la intención de luchar por su vida y la de sus amigos.

Lo mejor de la cinta está en su recreación de la violencia urbana, en esa ambientación que recuerda las entrañables películas de acción callejera seudofuturista, con jóvenes actuando como guerreros improvisados, manejando armas y equipo pesado implementado para la ocasión (buen detalle el del ómnibus escolar blindado), sumidos en el camino de la acción para defenderse de la amenaza a su entorno. Los cyborgs representan el mal corporativo y con intereses de represión total. Seres cuya apariencia de formales maestros de escuela y símbolos del orden, esconden verdaderas máquinas de matar, lo cual en esta historia se toma literalmente gracias a unos modestos efectos visuales, que logran su efecto de "película chatarra", y que además incluye algunos toques de gore nada desdeñables para recrear la violencia reinante.

En los roles principales destacan el joven actor Bradley Gregg, como el estudiante protagonista, quien cumple su rol y enfrenta un elenco de primer orden, como el actor Patrick Kilpatrick, el notable John P. Ryan, la actriz Pam Grier, el gran actor Malcom Mc Dowell, el veterano de "La naranja mecánica" al que se puede hacer alusión, aquí aparece como el director de la escuela, y el también veterano actor Stacy Keach, con un aspecto nunca visto, como el amo de los cyborgs.

A esta película se le critica su peligroso mensaje pro-vigilantes callejeros, pero sin tomarla demasiado en serio, "Curso 1999" es una cinta de interés, divertida con su visión desfachatada, con buenas actuaciones a cargo de un elenco de sólida madurez, una historia sencilla pero conducida eficazmente, y con mucha violencia gráfica satisfactoria. Recomendable.


lunes, julio 02, 2007

Las colinas tienen ojos (1977)

Bueno, ya hice un pequeño comentario sobre éste clásico del director Wes Craven en otro post. Pero he decidido agregar algunos datos que considero de interés.

Wes Craven escribió el guión de "Hills have eyes" a partir de un hecho real. Se trata del caso de la familia Sawney Bean, una pandilla de forajidos escoceses que vivian ocultos en cavernas, y que cometieron diversos crimenes, asesinando a los viajeros que atravesaban sus territorio, para además de robarles sus pertenencias, cocinarlos para comerse su carne. Todo ésto ocurrió en el siglo XV. De hecho, tuvieron el mismo fin que los asesinos de la pelicula.


Es obvio que Craven nuevamente recrea lo que ocurriría a una familia civilizada al exponerse a altas dosis de violencia, y de que modo ésto la afectaría, al igual que hizo en su primera pelicula "La última casa a la izquierda". El enfrentamiento con los asesinos canibales hace que los miembros de la ejemplar familia, que organiza paseos para mantenerse unida, que reza en grupo como buenos católicos, tambien sientan el impulso de matar, de destruir a sus enemigos, lo cual se expresa contundemente en la escena final. Ademas, el mismo director señala que su historia tambien representa la diferencia entre el primer y el tercer mundo, y los resentimientos y odios que pueden surgir ante el distancianmiento que existe entre ellos.

Sobre los actores, Janus Blythe, quien hace el papel de Ruby, ha desempeñado otros roles del género terrorifico como "Fantasma del paraiso" de Brian De Palma y en "Trampa mortal" de Tobe Hooper, en las cuales tuvo breves roles. Dee Wallace Stone es la actriz con filmografia más extensa que incluye a "E.T. el extraterrestre" de Steven Spielberg, y "Cujo" de Leawis Teague. Pero quien resulta más reconocido por este film es el actor Michael Berryman, quien interpreta al grande y calvo Plutón. El productor ejecutivo y amigo personal de Wes Craven, Peter Locke, interpreta al canibal llamado Mercurio, quien aparece brincando mientras se presentan los créditos iniciales.


Craven afirma que su intención fue crear una historia de horror muy seria y dura, a pesar de algunos detalles que puedan invitar a la risa, como ciertos diálogos entre los canibales. Afirma que siempre es recomendable lograr un equilibrio entre el miedo y el humor, afirmación que se comprueba en "Pesadilla en Elm Street", donde el tono bufonesco de Freddy Krueger sale a relucir en las secuelas de la pelicula, hechas por otros realizadores, no en las cintas de Craven , incluyendo la última que se realizó llamada "A new nightmare". El final se volvió a rodar y se añadió la escena entre Bobby y Júpiter, para emular el efecto sorpresa de "Carrie" de Brian De Palma.

El éxito de "Las colinas tienen ojos" no estuvo en los cines, sino más bien en la comercialización del video, que con los años la convirtieron en cinta de culto.

La secuela oficial de la pelicula fue realizada según Craven en forma muy accidentada, por falta de dinero y de organización, lo que no permitió desarrollar las ideas que pretendía. Wes Craven y el productor Peter Locke tenían en mente realizar la tercera parte titulada tentativamente "Hills have eyes 3", con un guión coescrito con el hijo de Craven, Jonathan. El argumento iba sobre el enfrentamiento entre los canibales contra un grupo de militares al interior de una base secreta del gobierno oculta en las colinas, que pretendia experimentar con la capacidad de los canibales de sobrevivir en aquellas condiciones. Esta idea finalmente ha tomado cuerpo en el guión de la secuela del remake de ésta pelicula que dirigió Alexandre Aja, que ha sido titulada "El despertar del diablo 2", estrenada este año, bajo la dirección de Martin Weisz, con resultados que dejan mucho que desear, como se ha podido comprobar en los cines. Una lástima.

La casa de los 1000 cadaveres (2003)

En la víspera de Halloween del año 1977, un grupo de jóvenes sufre un contratiempo en la carretera, por lo que buscan ayuda en un lugar llamado "Museo de monstruos y descerebrados". El extraño sujeto conocido como el Capitán Spaulding, un tío regordete y con grotesco maquillaje de payaso, es quien está a cargo del lugar. Los visitantes se sienten atraídos por la rareza de objetos que allí se encuentran, y solicitan al Capitán que los conduzca por el lugar en un bizarro tour. Además, tras sentirse atraídos por la leyenda del Doctor Satán, relato vinculado a aquella región, piden la localización del lugar donde supuestamente ocurrió su última aparición. Spaulding les indica una dirección a la cual los incautos viajeros acuden. En aquella casa dará inicio una noche aterradora: la familia Firefly los recibirá con los brazos abiertos.

Pude ver ésta película en la pantalla grande en su breve paso por nuestra cartelera. Recuerdo que al inicio la sala estaba llena de curiosos. Una vez que la película empezó, se soltó el extraño espectáculo, y a la media hora, la cuarta parte de los asistentes se había retirado de la sala. Demasiada rareza para un público conservador, y poco comprensible para cinéfilos de fin de semana. Esta película no se la traga cualquiera, y no me refiero a que sea demasiado fuerte, aunque tiene horror del duro, sino que su propuesta visual no es precisamente atractiva según los cánones a los que nos hemos acostumbrado tras tanto bodrio que es presentado como "cine de terror". "La casa de los 1000 cadáveres" es una joya como pocas.

El músico y director de cine Rob Zombie realiza aquí en su primera película un homenaje al cine de horror del cual es admirador. La película resulta un pequeño compendio de referencias a varios clásicos: desde "2000 maniacos", a la cual hay alusión discreta en el título y en su tono bufonesco y delirante que vemos en el personaje del Capitán Spaulding, a cargo del actor Sid Haig, pasando luego por "La matanza de Texas", "La última casa a la izquierda", etc., todo ello matizado con la estética del videoclip que caracteriza el trabajo de Rob Zombie, quien como músico de rock fue director de sus propios videos para la MTV, en su etapa solista y al lado de su grupo "White Zombie"; estas realizaciones guardan relación con el cine de horror clásico. De éste modo, se pueden apreciar muchas imágenes bizarras, flashbacks grotescos, chirriantes y que destacan lo perverso que hay en la mente de este grupo de asesinos conocidos como la familia Firefly, conformada por Mamá Firefly, que es la actriz Karen Black, figura dentro del género, Jerry, el actor Chris Hardwick, la bella Baby, papel a cargo de Sheri Moon Zombie, esposa del director, y a la cabeza de la pandilla Otis, encarnado por Bill Moseley, recordado por su trabajo en "La matanza de Texas 2".

Debemos reconocer que la historia contada no renueva en absoluto el cine de horror, por el contrario, depende mucho del pasado y puede producir el efecto en el espectador de "cosa ya vista". La estructura de la historia sigue las pautas de aquellos clásicos a los que referencia, por poner un ejemplo, la escena de la máscara que confecciona Otis con el rostro de una de las víctimas, que haría reclamar a Leatherface. Sin embargo, el tratamiento visual de Zombie permite aceptar esta nueva propuesta con nueva envoltura y muy vistosa.

De este modo, se suceden en la pantalla varias escenas enfermizas y personajes de presencia monstruosa. Ni la belleza y voluptuosidad de Sheri Moon Zombie evitan que la identifiquemos como otra de aquellas mentes retorcidas. A pesar de su diversidad de referencias, Rob Zombie logra componer una cinta de horror efectiva en este nuevo milenio.